Según el manual de diagnóstico de trastornos mentales (DSM-IV) Una fobia es un temor persistente e irracional que se debe a la presencia de un objeto o situación específica que limita el accionar de una persona llegando a limitar la relación de la misma con su entorno y sus seres queridos. A diferencia del miedo, el cual nos prepara para lo que va a venir sea real o imaginario, mientras que la fobia hace mención a una hipotética situación de peligro interno e incontrolable que bloquea el desarrollo de una persona. Las personas suelen recordar el momento en que comenzó todo, la persona relaciona dicho estímulo como aversivo y queda condicionado el miedo y angustia que vivió.
Diferencias entre Miedo, Ansiedad y Fobias
Miedo.- Es propio de la evolución humana, pues nos previene de un peligro y nos prepara pare el mismo, tanto para enfrentarnos como para evitarlo.
Ansiedad.- Es la reacción al miedo frente a un acontecimiento desencadénate, es como la persona analiza el problema y valora como hacer frente a esa situación.
Fobia.- Para evitar la ansiedad la persona limitará en lo posible la situación que desencadena su fobia creyendo que así logrará superar ese mal rato, pero no se da cuenta que se está limitando pues no lo puede controlar y no podrá superar esta situación.
¿Qué causa una fobia?
Se dice que una fobia puede tener su origen en la infancia debido a alguna mala experiencia en la niñez, puede que la persona haya experimentado un suceso traumático y que después lo haya asociado a una situación similar y eso le genera temor y por tanto debe evitar esa situación. (Por ejemplo, un niño que viaja con sus padres en avión y a la hora de aterrizar hay problemas, desarrollará una fobia a volar), otra posible causa pueden ser los factores genéticos y ambientales, es decir que los hijos repitan las fobias de sus progenitores.
Algunos tratamientos
Primero que nada será necesario el diagnóstico profesional, que valore el caso de esa persona en particular y que recomiende la mejor vía para solucionar el problema.
Algunas terapias han demostrado ser efectivas según cada caso:
PSICOTERAPIA: Que usualmente emplea técnicas de relajación muscular para que la persona pueda controlar mejor sus emociones.
TERAPIAS CONDUCTUALES: Buscará que de manera gradual y paulatina la persona pueda hacer frente a la situación fóbica.
TERAPIA COGNITIVA: Buscará encontrar una explicación al estímulo temido con el fin de modificar ese pensamiento por otro que lo sustituya.
FARMACOLOGÍA: Brinda ayuda en la parte de la ansiedad pero será necesaria complementarla con algún tipo de terapia.
En conclusión, es necesario hacer ver a la persona que todo depende del trabajo que ella haga para superar su problema y que al final con trabajo y paciencia es posible superarlo y así mejorar su calidad de vida.